El caballo más pequeño del mundo
si quiere ver el video pincha en "Leer más"

• Son cuatro las marchas o aires naturales del caballo: el paso, el trote, el galope normal y el galope de carrera.
• El paso es una marcha de cuatro tiempos, oyéndose con claridad la secuencia regular de las pisadas: un, dos, tres, cuatro. Si se ha empezado con el pie izquierdo, la secuencia será:

1. pie izquierdo;
2. mano izquierda;
3. pie derecho 
4. mano derecha.

• El trote es una marcha de dos tiempos: uno-dos, uno-dos..., apoyándose sobre una diagonal (mano y pie diagonal) simultáneamente y tras un instante de suspensión, cuando el caballo está en el aire para cambiar de una diagonal a otra.
• El galope normal es una marcha de tres tiempos: uno-dos-tres, uno-dos-tres...,con una pausa de suspensión después de la tercera pisada. Si se empieza con el pie izquierdo, la secuencia será:

1. pie izquierdo
2. pie derecho junto con la mano izquierda
3. mano derecha. 

Esta mano es llamada «guía», ya que indica la dirección que lleva el caballo.

• El galope de carrera es una marcha de cuatro tiempos, como una versión alargada del galope normal, apoyando el pie y la mano diagonal por separado, dando lugar a un efecto de cuatro tiempos.
• Otras marchas especiales son: el paso de ambladura, en el que el caballo trota moviendo los miembros laterales en vez de los diagonales; el de andadura con cinco tiempos propio del silla americano; el «rack», paso rápido, con gran flexión y elevación de las rodillas, etc. Lo importante  es que en cualquier marcha el caballo ande recto, colocando los pies en la misma línea justo detrás de la huella de las manos, sin desplazamientos a los lados.

El esqueleto del caballo
Toda la masa corporal y todo el movimiento del caballo se sustenta sobre el conjunto de huesos, que llamamos esqueleto. Los músculos activan el movimiento de esta masa corpórea, que se desarrolla gracias a las articulaciones que se encuentran en las uniones
entre los huesos. Dichas articulaciones se sujetan con los ligamentos, cordón fibroso homogéneo, flexible y resistente, y determinan el ángulo máximo de flexión de cada hueso. La conexión entre músculos y huesos se logra por medio de los tendones, largos órganos cuyas fibras se disponen en haces paralelas entre sí, de gran resistencia, que a la vez dan
soporte e impiden la rotura de los músculos.